En una conferencia de prensa desde la Casa de Gobierno de la provincia de Buenos Aires, Kicillof expresó sus condolencias a las familias y señaló que nada justifica el nivel de violencia y sadismo demostrado en el crimen. “Le pido al presidente Javier Milei que convoque urgentemente a los gobernadores para formar una mesa de trabajo nacional, porque el narcotráfico afecta a todo el territorio argentino y es un fenómeno internacional”, sostuvo.
El mandatario destacó la necesidad de una estrategia federal seria y coordinada, que incluya inversión en tecnología, medios, agentes y equipamiento para combatir a las bandas criminales, con el concurso de la justicia federal y las fuerzas nacionales. Advirtió que “es absurdo pensar que se pueda resolver este problema sin trabajo conjunto y articulado a nivel nacional”.
Kicillof atribuyó el crecimiento del narcotráfico a la insuficiente presencia estatal y a la falta de oportunidades para los jóvenes, y remarcó la necesidad de inversión pública en educación, salud y seguridad pública para revertir esta situación.
En relación a la banda identificada, explicó que su epicentro estaba en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, con fuerte arraigo en barrios como Bajo Flores, y que las víctimas residían en el conurbano bonaerense. La droga llega a Argentina desde el exterior y recorre miles de kilómetros por el país, haciendo al narcotráfico un problema transnacional y federal.
Sobre la investigación del femicidio, Kicillof informó que ya hay seis detenidos y seis prófugos, y reafirmó el compromiso provincial de acompañar a las familias y exigir justicia para que los responsables paguen por sus crímenes.
El gobernador también respondió a críticas recientes de la ministra de Seguridad nacional Patricia Bullrich, quien había cuestionado la gestión en Buenos Aires, señalando que la lucha contra el narcotráfico debe ser encabezada por el presidente y contar con una política integral que trascienda las diferencias políticas.