En una contundente derrota para el gobierno de Javier Milei, el Senado argentino rechazó los vetos presidenciales a las leyes que establecen la emergencia en salud pediátrica y el financiamiento a universidades públicas, incluyendo al emblemático Hospital Garrahan.
Con 59 votos a favor, 7 en contra y 3 abstenciones, la cámara alta consiguió superar el quórum requerido para insistir la ley, obligando al Poder Ejecutivo a promulgarla según lo establecido en el artículo 83 de la Constitución Nacional.
La ley de emergencia pediátrica busca garantizar el funcionamiento permanente y sostenido del Hospital Garrahan, estableciendo un fondo de contingencia para atender las necesidades críticas y salarios actualizados para todo el personal asistencial y no asistencial. También contempla medidas como la eximición del pago de Ganancias para quienes realicen guardias médicas.
Tras este revés, el Gobierno anunció que destinará una inversión de 30.000 millones de pesos para la modernización y mejora de la infraestructura del Garrahan, en un compromiso que responde a la presión social y política generada por la situación del sistema de salud infantil.
El rechazo de los vetos marca un fuerte golpe para la administración de Milei, que había intentado frenar estas asignaciones presupuestarias en medio de ajustes y recortes generalizados, y refleja la firmeza que tiene la oposición para proteger los derechos sanitarios y educativos en medio de un contexto electoral.