El Origen del Conflicto y la Denuncia de Intimidación
El reconocido conductor, Marcelo Tinelli, rompió el silencio tras el incidente que involucra a su hija, Juana Tinelli, quien presentó una denuncia penal por amenazas telefónicas.
A través de un extenso descargo en redes sociales, el exvicepresidente del Club Atlético San Lorenzo de Almagro afirmó que estos hechos están directamente ligados a un complejo litigio por una deuda de origen clubístico, de la cual él es garante personal.
La situación escaló a la esfera judicial después de que la joven denunciara haber recibido una llamada intimidatoria, en la que el interlocutor se habría identificado como Gustavo Scaglione, un empresario con participación en diversos medios de comunicación.
El conductor aseguró que su familia está siendo víctima de un “acoso judicial y mediático” desde hace tres años, lo que habría culminado en esta amenaza directa.
El Conflicto de Intereses Mediático
Según la versión de Tinelli, el conflicto se centra en un pasivo que fue generado por San Lorenzo durante su gestión, el cual fue adquirido por Scaglione.
Aunque el conductor desmintió públicamente los montos que trascendieron en algunos medios (señalando que no alcanzan los diez millones de dólares), la disputa derivó en acciones legales, incluyendo el embargo de su chacra en José Ignacio, Uruguay, a fines de 2024.
El presentador no solo se refirió a la deuda, sino que también puso el foco en el rol de ciertos medios de comunicación.
Acusó directamente a colegas y amigos de Scaglione de prestarse a lo que denominó un “juego perverso” para ejercer presión mediática. La gravedad del asunto se intensifica debido a que el acreedor es un actor relevante en el ecosistema mediático, lo que levanta interrogantes sobre el manejo imparcial de la información en otros espacios.