Brad Pitt demandó a Angelina Jolie por u$s35 millones en daños y perjuicios por la venta de su parte del viñedo Château Miraval. La actriz se defendió, alegando que la demanda es un intento de Pitt de “acosar y controlar” su vida tras el divorcio.
Brad Pitt demandó a Angelina Jolie por u$s35 millones en daños y perjuicios por la venta de su parte del viñedo Château Miraval. La actriz se defendió, alegando que la demanda es un intento de Pitt de “acosar y controlar” su vida tras el divorcio.
A casi una década de su separación, la saga judicial de Angelina Jolie y Brad Pitt se recrudece con una nueva demanda. El actor ha reclamado a su exesposa 35 millones de dólares en concepto de daños y perjuicios por la venta de la participación de ella en el viñedo francés Château Miraval, la propiedad donde la pareja contrajo matrimonio en 2014. El litigio, que se ha extendido por cuatro años, no parece amainar, con ambas partes protagonizando duros enfrentamientos a través de sus equipos legales.
La confrontación estalló en 2021, cuando Jolie vendió su parte de la finca a un empresario ruso, Yuri Shefler. Pitt denunció a la actriz en 2022, alegando que la transacción se realizó sin su previo consentimiento, violando un supuesto acuerdo mutuo de no vender las acciones sin el conocimiento del otro.
Sin embargo, el equipo legal de Jolie reviró la acusación, alegando que tal acuerdo nunca existió y que la venta fue una forma de cerrar un “capítulo profundamente doloroso y traumático de su vida y la de sus hijos”.
La demanda de Pitt por US$35 millones fue revelada por la revista People este miércoles. La defensa de Jolie arremetió contra el actor, afirmando que la demanda “es la manifestación del esfuerzo que Pitt ha realizado durante años para acosar y controlar a Angelina“. Los abogados de la actriz insisten en que Pitt no quiso comprar su parte del negocio porque ella se negaba a firmar un acuerdo de confidencialidad de cuatro años que cubría su “conducta indebida personal”, en referencia a un incidente de 2016 que llegó a ser investigado por el FBI.
El litigio se centra en la validez del acuerdo de venta. Pitt ha acusado a su exesposa de haber filtrado información privilegiada al comprador para facilitar la adquisición. Para probar su punto, el actor reclama en los juzgados que la actriz presente las comunicaciones privadas relacionadas con esa transacción. La protagonista de Maléfica se ha acogido al privilegio de confidencialidad entre abogado y cliente para no atender la demanda.
La próxima audiencia pública del caso está programada para el 17 de diciembre. La defensa de Jolie se muestra firme ante la demanda de Pitt, señalando que la complejidad del proceso y el costo de producir las pruebas “es responsabilidad del propio señor Pitt”.
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