Durante cuatro días, jóvenes universitarios de entre 23 y 27 años de Israel, Palestina y Estados Unidos se dieron cita en Roma y el Vaticano para dialogar en un espacio de escucha y confianza.
La segunda edición de Meaning Meets Us, organizada por Scholas Occurrentes, buscó ser un puente que permitiera a jóvenes que han crecido en medio del conflicto compartir sus experiencias, abrirse y soñar con un futuro de paz.
Shadan Khatib —profesora palestina que reside en Israel— resumió la experiencia con estas palabras: “En Roma sentí que podía ser yo misma. No tuve que fingir opiniones ni esconder lo que pienso”.
Su testimonio destaca la dificultad que enfrentan a diario los palestinos que viven dentro de Israel, quienes cargan “una doble identidad” y no siempre pueden expresarse con libertad, tanto en la universidad como en el trabajo.
El encuentro permitió derribar esas barreras. Shadan valoró que “aquí todos somos iguales, todos podemos hablar libremente” y alentó a otros jóvenes a expresar sus ideas sin miedo, señalando que “tenemos muchas herramientas —como la inteligencia artificial— para construir algo distinto”.
En una línea similar, Yehonatan Grill, estudiante de la Universidad de Tel Aviv, calificó el programa como una oportunidad para “romper la rutina de silencio que domina los campus universitarios” y descubrir “que detrás de todo el odio y las diferencias hay personas que disfrutan reír, jugar y tener amigos”.