Guillermina Valdés participó en una entrevista televisiva donde reflexionó sobre el proceso de aprendizaje que vivió junto a su hija Paloma Ortega.
La modelo admitió haber atravesado una profunda autocrítica tras conocer la orientación sexual de la joven cuando esta tenía 16 años. Valdés explicó que el suceso la interpeló sobre su presencia y atención en el crecimiento de sus cuatro hijos.
La actriz manifestó que sintió una herida en su ego por no haber percibido la situación de su hija con anterioridad. Según sus declaraciones, este episodio le permitió revisar la dinámica de comunicación en su hogar, la cual definió como un intercambio constante y no una imposición de criterios.
Valdés remarcó la importancia de nutrirse de las experiencias que sus hijos le plantean para transformar su propia perspectiva como madre.
Privacidad y formación de identidad
Respecto a la identidad personal, la diseñadora sostuvo que la sexualidad no define a los individuos, sino que pertenece al ámbito de la vida privada. Expresó que sus consejos hacia Paloma, quien hoy tiene 23 años, se enfocan en el respeto hacia el prójimo y el cuidado de la salud.
Para la empresaria, los valores y las elecciones éticas son los elementos que realmente constituyen la esencia de una persona, independientemente de sus preferencias.
Paloma Ortega mantiene actualmente un perfil reservado y desarrolla su carrera en el ámbito de la moda. Recientemente hizo pública su relación con Ana Mir Bertone, hija del locutor Lalo Mir. Esta actitud de resguardo coincide con la decisión que tomaron Valdés y Sebastián Ortega de proteger la intimidad de sus tres hijos en común hasta que alcanzaran la mayoría de edad.