El objetivo principal es acordar la sanción del Presupuesto 2026 y proyectar reformas estructurales, dejando para más adelante la discusión sobre la coparticipación federal, aunque el Ejecutivo se mostró abierto a retomarla.
Encuentros con gobernadores aliados y reclamos provinciales
El primero en llegar fue Orrego, que ratificó su acompañamiento al proyecto presupuestario presentado por el Poder Ejecutivo y destacó la importancia de esta herramienta como “una hoja de ruta” para las administraciones nacionales y provinciales.
En la reunión, también se abordaron reformas laborales, fiscales, tributarias y la actualización del Código Penal. Orrego manifestó especial interés en avanzar con una ley de glaciares para impulsar políticas sólidas que den seguridad a la industria minera, sector estratégico para el desarrollo económico de San Juan.
Por su parte, Llaryora expresó una postura más cautelosa. Reconoció la importancia de contar con un presupuesto “porque un país sin presupuesto es un país sin rumbo”, aunque pidió modificaciones para que el proyecto sea aprobado.
Además, pidió que la reforma laboral mantenga ciertos aspectos del régimen actual pero introduzca cambios específicos. Durante la reunión, el gobernador cordobés insistió en la necesidad de acuerdos que involucren también a intendentes y sectores productivos para lograr consensos amplios.
Construcción de una agenda consensuada y gira de Santilli
Tras estos encuentros, se anticipa que Santilli continuará una gira para fortalecer vínculos con gobernadores aliados.
Está previsto que visite Entre Ríos, Salta, Mendoza, Chaco y San Luis, buscando consolidar apoyos políticos y responder demandas provinciales, como la restitución de fondos educativos y deuda previsional puntualizada por Córdoba.
Sin embargo, aún con diálogo y promesas de coordinación directa con el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, la desconfianza persiste en algunas provincias que advierten que la concreción de acuerdos dependerá de la disponibilidad de recursos.