En un segmento de su programa, Mario Pergolini abrió con un gesto triunfal: sostuvo un trofeo y unos lentes oscuros, para ironizar sobre la copa entregada a Rosario Central por la AFA antes de terminar oficialmente el campeonato.
Consultado por su panelista, Pergolini respondió en tono burlesco que había sido nombrado “mejor jugador hispanoparlante intercontinental sub 70 de los últimos seis meses”, aludiendo críticamente a la proliferación de torneos en el fútbol argentino bajo la actual administración de la AFA.
El conductor imitó a Claudio “Chiqui” Tapia, presidente de la AFA, en una escena que terminó con el público y los panelistas dándole la espalda, en referencia al rechazo del plantel de Estudiantes de La Plata a hacer un pasillo tradicionalmente reservado para campeones.
La polémica nació porque la AFA impuso la premiación tras una votación cuestionada y exigió a Estudiantes cumplir con el pasillo pese a haber expresado desacuerdo y desmentir haber avalado el título otorgado a Rosario Central solo por puntos obtenidos en la temporada.
Pergolini usó el sarcasmo para criticar la legitimidad del título y la gestión de Tapia, afirmando que él también era “campeón legítimo” de la televisión por la audiencia que genera, sin dejar de poner en tela de juicio la transparencia del proceso de premiación y la creación constante de nuevos trofeos.
En este marco, bromeó con la idea de devolver el premio si le exigían devolver el dinero asociado a la premiación, ganándose finalmente el aplauso de su audiencia tras cambiar el gesto.